Desaparece Kate, desaparece.
23 de marzo de 2024. Por mi salud física y emocional trato de no indignarme muy frecuentemente, sin embargo, a veces también me arde la sangre, como a todo el mundo, sobre todo cuando el respeto, la consideración y el amparo hacia los que sufren se dejan a un lado por otros intereses espurios. Ayer acabó de estallar mi indignación después de semanas de gestación en el que ese sentimiento iba fraguando a medida que escuchaba las noticias sobre la…